La Mente de Dios

No me hagan caso a mí; pero si Einstein; una de las mentes más brillantes que han existido en el mundo durante los últimos siglos lo dice, entonces presten atención. "Una teoría que resumiera toda la existencia del Universo y la vida sería como conocer la Mente de DIos" fueron sus palabras.

Pero, ¿cómo podríamos conocer la Mente de Dios que sostiene todo el Universo y aún la fragilidad de la vida humana? ¿Será posible que algún día la ciencia y la tecnología puedan descubrir y conocer Su Mente?

Este interés en la Mente Divina no es nuevo. Aproximadamente 500 años a.C. varios filósofos en Grecia Antigua comenzaron a reflexionar en cuál era el origen de las cosas. Cansados de mitologías y fábulas populares se dieron a la tarea de investigar seriamente lo que llamaron el "principio regente" de todo lo que existe. Algunos concluyeron que era el fuego; otros el agua; el aire y hasta el átomo (Demócrito). SIn embargo hubo uno, Heráclito, que tomó una via alterna. Su preocupación no era tanto el origen de las cosas, sino ¿qué mantenía todo en perfecta armonía? Decía que todo en el Universo es un continuo fluir, o movimiento. Comparaba esto con un río. Si entras al río ahora, y vuelves a entrar en una hora, entrarías a un río completamente distinto porque el agua no es la misma; porque todo está en continuo movimiento. De ser así, pregunta Heráclito, ante un continuo movimiento, ¿qué mantiene el orden? ¿Por qué siguen existiendo cuatro estaciones en el año? ¿Por qué continua lloviendo, amaneciendo, anocheciendo, y todo lo que implica un balance en la naturaleza? Su respuesta fue: el LOGOS. Esto significa palabra, razón o mente en griego. La Mente de Dios mantiene el orden, la armonía en todo lo que existe. Más adelante otros movimientos filosóficos como los estoicos y Filón de Alejandría retomaron el concepto del LOGOS para hablar de la Mente de Dios detrás de todo lo que existe.

Y, ¿qué tiene esto que ver con nosotros y nosotras? Ah mi hermano y hermana, cada ves que lees en tu Biblia el Evangelio según Juan 1:1 dice: En el principio era el Verbo (algunas versiones: la Palabra). Este Verbo o Palabra se refiere a Jesús quien fue la encarnación de Dios en este mundo. Si pudieses leer el texto en griego, idioma original en que se escribió, leerías: En el principio era el LOGOS... Si, el mismo que habló Heráclito y los otros filósofos; el que mantiene el orden y la armonía en el Universo, en todo lo que existe. Jesús es el LOGOS de Dios. Estuvo presente en la creación de todas las cosas. 

¿Cómo explican los astrofísicos que todo surge de una explosión (Big Bang) y terminó produciendo un espacio perfectamente sintonizado para la vida llamado Tierra? No tienen explicación, a menos que una Mente haya dirigido el movimiento, el fluir hacia el orden y la armonía. Esa Mente es Jesús, nuestro Señor; y, ¡podemos conocer la Mente de Dios!

Ahora bien, nuestras vidas pueden ser un continuo fluir frenético, un movimiento constante, cada vez con más prisa, que ha terminado por cansarnos y agobiarnos. La Mente de Dios dijo: "Vengan a mí los cansados y cargados que yo los haré descansar..." Porque es Él quien mantiene el orden y la armonía en el Universo y también en nuestra vida.

Que hoy puedas abrir tu corazón a la Mente de Dios, a Jesús, para que haya orden y armonía en tu caos y desorden.

Que comiences un camino nuevo que te lleve a conocer la Mente de Dios; y que comprendas que ese camino continúa para siempre...

(Si quieres profundizar más en el tema pregunta por nuestro libro: La Mente de Dios: El Desafío del Ateísmo)