El Mapa de Dios

Cada segundo mueren 1,000,000 de células en tu cuerpo. Cuando termines esta lectura habrán muerto ¡aproximadamente 250,000,000! Estamos compuestos por aproximadamente 40 trillones de células, casi la mitad del número de estrellas que existen en todas las galaxias del Universo (La próxima ocasión en que te sientas "poca cosa" piensa en la complejidad de lo que Dios creó cuando te creó) 

La única razón por la cual no nos afecta la muerte continua de células es por lo que se conoce como regeneración celular. Por cada célula que muere, tu cuerpo regenera otra. Lo más asombroso es que esa nueva célula regenerada es idéntica a la que murió. ¡Tú eres como una complejísima fotocopiadora de células! Esta reduplicación celular se la debemos a algo más asombroso todavía: el Ácido Desixorribonucleico. ¿Qué con qué se come? Esto es el famoso ADN. Se trata de un código genético en tus células compuesto de cuatro químicos que los científicos han clasificado como letras: A, T, G y C. Cada célula de tu cuerpo tiene ¡3,000 millones de letras! Para que tú seas tú, esas letras están organizadas de una manera específica. Lo que te hace distinto a todos los demás seres humanos que han existido o existirán es el orden de esas letras en tus células. Esto se ha denominado el código celular del ADN. Tú eres unic@ en el Universo. El código que Dios puso en tu ser te define a tí entre el resto de las criaturas que existen.

Cuando se descubrió esto en los años 90, el presidente Clinton dijo: "Hemos descubierto el lenguaje en el que Dios creó la vida". Muchos científicos y científicas afirmaron que se requería más fe para no creer en la existencia de Dios que para creer...

El ADN es la evidencia del mapa que Dios ha puesto en tu vida y la mia. Está escrito en cada célula de tu cuerpo el diseño con el cual fuíste cread@. Tus células están codificadas para ser quien eres y Dios pretende llevarte a esa plenitud.

Jesús le dijo a sus discípulos: "Ustedes son la luz del mundo"; pero ¿quiénes eran? Gente común, sin estudios, sin apellidos, sin títulos, sin futuro; no para Él. En cada célula de esos discípulos estaba escrito un código que leía: luz del mundo; y no puedes escapar de ese diseño, porque mientras leías esto, Dios ha estado en el proceso de copiar y copiar su "mapa" en tí...